XXXII Carta-Circular del Consiliario Nacional de la ARPU – NOVIEMBRE 2019

LOS ANGELES EN LA VIDA DE LA IGLESIA, DEL CRISTIANO, Y EN LA ARPU (II)

Queridos adoradores (as) de Jesús Sacramentado en la ARPU

1.- Continuamos con la serie de cartas circulares, doctrinales y formativas sobre Los Ángeles (“ANGELI”), que comenzaba el mes pasado. El título y tema eran tomados de la “exposición de Las Edades del Hombre en Lerma (Burgos) de 2019, inaugurada en abril pasado por el Sr. Arzobispo de Burgos en presencia de la Reina Doña Leticia. Trata sobre los Ángeles”.

Os ponía algunos apartados o puntos: la originalidad y oportunidad del tema, tienen mucho que ver con nosotros: “Los Ángeles están puestos por Dios para nuestra salvación”. También porque “en nuestro Manual sobre la ARPU[1] no podían faltar para que nosotros aprendamos de ellos y en la relación con ellos y con la Eucaristía. Asimismo, que ellos son y están en la entraña -como parte fundacional del carisma- en la ARPU. También que seremos compañeros suyos en la adoración del Cordero Místico en el Cielo, el Mismo -insisto- a quien adoramos en la Eucaristía. Os informaba también de que el tema está tratado en el capítulo 3 de nuestro Manual (parágrafo 2.18, pp. 105-108) y, sacando como conclusiones prácticas, recuerdo esta primera: “Cantar con los ángeles (si no ya como ellos) ensayando para cuando estemos en la presencia de Dios en el Cielo…”.

Recogiendo la fe de la Iglesia un antiguo canto popular, lo expresa y podemos seguir cantando así:

“Bendito, bendito, bendito sea Dios, los ángeles cantan y alaban a Dios”.  Una 1ª. Estrofa canta: “Creo, Jesús mío, que estás en el altar, Oculto en la Hostia te vengo a adorar”.

Citando a mi Arzobispo decía en aquella carta en la Revista Diocesana “Sembrar”: “Se trata de una temática nunca tratada hasta ahora y que, sin embargo, forma parte de la fe cristiana y tiene profundas raíces bíblicas”.

Él ya ponía algunas citas: “He aquí, se dice en el libro del Éxodo (23,20), que yo voy a enviar un ángel delante de ti, para que te guarde en el camino y te conduzca al lugar que te tengo preparado”.

Asimismo, en una más reciente en la Revista Diocesana (13 al 26 de octubre de 2019) con el título “Servidores y mensajeros de Dios”.

Dada la importancia y realidad de los ángeles para la Iglesia, para los cristianos y en la ARPU, los tratamos en esta y sucesivas Cartas-circulares sacando al final -como siempre- algunas aplicaciones prácticas para la vida del cristiano y en particular para nosotros en la ARPU.

1.- Los Ángeles En la Sagrada Escritura.

Es ella la que nos introduce y asoma a este mundo maravilloso de los ángeles y Arcángeles, incluso con sus jerarquías celestes: Ángeles, Arcángeles, Tronos, Dominaciones, Principados, Potestades, Virtudes, Serafines y Querubines…La Tradición de la Iglesia y la misma liturgia, v.g., en la conclusión de los prefacios los va presentando. Se habían omitido en la reforma conciliar quedando concentrados en las dos series más generales, las de Ángeles y Arcángeles, pero en la 3ª edición del Misal Romano (a. 2017) ha vuelto a recuperar esas nueve jerarquías que tienen su fundamento y nombres en la Revelación divina, v.g., en las Cartas de San Pablo: Efesios, Colosenses, etc. Veamos cómo aparecen los Ángeles. En alguna ocasión añadiré mi oportuno y breve comentario.

1.- En el Antiguo Testamento:

Aparecen siempre en relación al culto divino y al misterio de nuestra salvación y los encontramos continuamente en la Sagrada Escritura; desde el comienzo de la Historia de la Salvación con los querubines que expulsan a nuestros primeros padres del paraíso “para cerrar el camino del árbol de la vida” (Gn 3, 23); fue después de la caída y desobediencia original (pecado). Entresaco además sólo algunos episodios:

2.- En el sueño de Jacob:

“Una escalinata, apoyada en la tierra, con la cima tocaba el cielo. Ángeles de Dios subían y bajaban por ella” (Gn 28, 12). Os comento. Fue en Betel donde Jacob tuvo su visión en sueños de la escalinata. Es significativo el nombre “ciudad de luz”. “Ángeles de Dios subían y bajaban por ella”. El Señor que estaba en pie junto a ella le dijo: “Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham”. El Señor le hace promesa sobre la descendencia mesiánica. Jacob tiene experiencia de Dios: “¡Qué terrible es este lugar; no es sino la Casa de Dios y la puerta del Cielo!”.

Para nosotros ¿es amable la presencia de Jesús Sacramentado, Dios con nosotros? Más que temible ¿es deseable entrar en esa Presencia “real, verdadera y sustancial” de Jesucristo Sacramentado? Podemos decir con el salmista: “¿Qué deseables son tus moradas, Dios de los ejércitos?” Los ejércitos son ellos, los ángeles y todas las jerarquías del Cielo. Y su morada son los Sagrarios que hemos de “asaltar” pero con “suma” adoración y veneración, expresadas hasta en los signos debidos a esta asombrosa realidad que la liturgia y normativa de la Iglesia sigue llamando en su celebración: “Su Divina Majestad”, “Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo”,  “Admirable, Augustísimo Sacramento”, “Sagrados Misterios”, “Santísima Eucaristía”, “Santa Misa” (en Occidente) y “Divina Liturgia” (en Oriente)…

¿Ponemos y cumplimos los signos, gestos y posturas de la adoración y veneración “suma” que están señalados por el Magisterio de la Iglesia?, (v.g., en las Instrucciones eucarísticas, en la Ordenación  General del  Misa Romano, en el Código de Derecho Canónico y otros documentos)

-Estar de rodillas, hacer la genuflexión, la incensación, adornar con luces, flores, vestiduras, usar objetos y vasos sagrados dignos, hacer silencios,  entonar cantos adecuados…

Desde y con santo Tomás de Aquino seguimos cantando: “Tantum ergo Sacramentum veneremur cernui: a tan alto Sacramento adoremos de rodillas”.

Los ángeles acompañan a Dios y la experiencia nuestra de Dios en la Eucaristía (por la fe) ¿es de que “suben y bajan” hacia Él? La Fundadora de la ARPU sí la tenía. Gozó de visiones o apariciones del Santísimo.

Moisés ante la presencia de Dios (zarza ardiente) ya escuchó la voz: “descálzate, que la tierra que pisas es sagrada”.

Más adelante dirá Jacob: “He visto a Dios cara a cara y he quedado vivo” (cf. Gn 32, 23-33). Nosotros por adorar con fe a Dios en los Sagrarios no sólo no moriremos sino que tendremos la vida eterna (cf. Jn 6).

2.- Otras intervenciones y presencias de los Ángeles en el Antiguo. Testamento.

 Sería largo hacer todo el recorrido por los libros del Antiguo Testamento para ver la presencia y actividad de los Ángeles, por ejemplo, los dos ángeles antes de la destrucción de Sodoma y la salvación de Lot (cf. Gn 19). Sabemos después lo de un ángel exterminador o devastador de Egipto: interviene para liberar Dios a su pueblo, que un ángel guiaba y acompañaba al Pueblo de Dios (Ex 23, 20-21 a), asimismo a los patriarcas y profetas. Singular belleza y conmoción presenta la teofanía que tiene el profeta Isaías al recibir y tener experiencia de su vocación de profeta:

“Junto a él (el trono de Dios) estaban los serafines cada uno con seis alas: con dos alas se cubrían el rostro, con dos el cuerpo, con dos volaban, y se gritaban uno a otro diciendo: “Santo, santo, santo es el Señor del universo, llena está la tierra de su gloria” (Is 6, 2-3). El Apocalipsis nos dirá que eso mismo le cantan en el Cielo los Bienaventurados con todas las jerarquías de los ángeles, a las que nos unimos nosotros en la liturgia y en la adoración eucarística. Jesús es el mismo aunque de distinto modo.

Querubines cubren y guardan el Arca de la Alianza del Antiguo Testamento porque contenía: las Tablas de la Ley, la Vara de Arón, el Maná…sólo figuras de las realidades del Nuevo: “Dios con nosotros” Encarnado, Resucitado, Sacramentado. Es necesario aceptar y vivir de esta realidad para poder llamarse y ser católicos en la Iglesia de Jesucristo.

 

3.- En Los Salmos: son muchos los que aparecen alabando a Dios y en servicio a los hombres. Por citar algunos.

  • Salmo 8: “lo hiciste poco inferior a los ángeles”. Referido a Cristo en su humanidad pero aun así es el Rey de los Ángeles por ser la del Verbo encarnado en él como veremos.

Referido a nosotros en sentido cristiano: sí, tienen naturaleza superior a la nuestra (totalmente espiritual) pero aun así somos objeto de predilección de Dios que no ha tenido con ellos porque no han necesitado como nosotros su misericordia y redención.

Ya veremos en qué nos envidian ellos.

– Cf. Salmo 33: “El ángel del Señor acampa en torno a sus fieles y los protege”.  En otro lugar se dice que “librará a los que temen a Dios…”

-Cf. Salmo 77, 1-39: (II) “Dio orden a las altas nubes y abrió las compuertas del cielo; Hizo llover sobre ellos maná, les dio un trigo celeste y el hombre comió pan de ángeles”.

 

El mejor comentario de estos versículos del salmo 77 es el que hace el mismo Jesucristo hablando de sí mismo como Pan bajado del Cielo, el verdadero Pan, el que les dará el Padre; que no fue Moisés que sólo consiguió del cielo una figura de la Eucaristía, el maná (cf. en el cap. 6 de San Juan). Por ello el mismo Jesús comenta: “vuestros padres en el desierto comieron el maná y murieron…en cambio, el que come de este Pan (Él mismo comida y bebida verdaderas) vivirá eternamente y yo le resucitaré en el último día” (cf. Jn 6). ¿Qué mejor promesa queremos o podremos querer?

-Cf. Salmo 90: “A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos”. Lo cumplen los de nuestra guarda (veremos en su momento un bello comentario de San Bernardo).

– Salmo 102: Las dos últimas estrofas vienen a decir lo mismo que las del salmo 107.-cf. Salmo 107: al final se presentan dos estrofas referidas a ellos: “Bendecid al Señor, Ángeles, poderosos ejecutores de sus órdenes, prontos a la voz de su palabra”. “Bendecid al Señor, ejércitos suyos, servidores que cumplís sus deseos…”. Cf. Salmo 137: “Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti”.

Ese es -será- nuestro destino y meta gloriosos, dar gracias, cantar con los ángeles las alabanzas y misericordias del Señor por toda la eternidad. Aquí en la tierra nos ensayamos ya -sobre todo- en la liturgia y adoración eucarísticas.

4.- En el Cántico de las criaturas (cf. Daniel 3,57-88.56).

Es toda la creación la que alaba al Señor. No podían faltar ellos y se les invita junto con toda la creación a alabarle. Entre las criaturas estamos nosotros para alabar al Creador, para nosotros, además Redentor: “Ángeles del Señor, bendecid al Señor; cielos, bendecid al Señor”.

El tema continuará, Dios mediante. Pasaremos a ver los Ángeles en el Nuevo testamento. ¿No os parece interesante y que tienen mucho que ver con nosotros o mejor nosotros con ellos? Por qué será que los fundadores de la ARPU a la hora de expresar en imágenes el carisma recibido supieron hacerlo con una corona de ángeles sobre la Sagrada Forma como adorándola y señalando al mismo que adoran en el cielo invitándonos a nosotros y a  todos los hombres a adorarle. Por algo la fundadora principal en su -nuestro- himno de la ARPU los menciona, en concreto a los serafines. ¿Por qué será?

5.- Aplicaciones prácticas a tener en cuenta:

1ª. Veamos a LOS ANGELES en nuestra vida de cristianos apóstoles de la Eucaristía, en la vida y los apostolados-misión de la  Iglesia y de la ARPU.

2ª.- Ensayemos a cantar y adorar a Jesús Sacramentado en la tierra (en todos los Sagrarios es lo nuestro) como preparación “al alto grado de Cielo” que nos espera con ellos.

3ª.- Encomendarnos a ellos y a nuestro Ángel de la Guarda (rezarle) para nuestra santificación en momentos puntuales del día. v.g. al levantarnos, ofrecimiento de Obras, antes de hacer la oración y adoración, al despedirnos de Jesús en el Sagrario, antes de acostarnos, etc. ¿Lo hacemos?

.- Encomendarles nuestras actividades o apostolados. A todos los niveles y a nivel nacional también: las mismas noticias son motivo y tema, v.g., la que se adjunta en el Noticiero de este mes: la carta respuesta del Señor Obispo de Huelva. Encomendarles qué debemos hacer ante la respuesta de tener que buscar  Postulador  y sufragar gastos si no tenemos cuota, etc.

5ª.- Sobre todo encomendarles a los que ya somos adoradores en la ARPU y a los posibles con la gracia de Dios y nuestra necesaria colaboración y apostolados. Es decir, por decirlo más claro, encomendemos al Ángel de la Guarda de aquellos a quienes queremos acercar a Jesús Eucaristía… y, si es preciso y Él le da ese don, que sea su adorador en la ARPU.

Por ello encomendarles los asuntos: realidades y coordenadas eclesiales que se ponen en el Memorare y Noticiero para este mes de noviembre: Memoria de las realidades de la ARPU en este 3º año de nuestra gestión como Consejo Nacional. Pedimos vuestra ayuda y colaboración para mantenerlas pues es mucho trabajo para nuestras fuerzas.

6.- En resumen: sean nuestros buenos “cómplices” para crecer en santidad y en nuestros apostolados. Debemos hacerlo por ser bautizados y la ARPU es un “cauce” estupendo  para mejor lograrlo. No me digáis que no es un tema y una realidad bellos y concretos.

Vale la pena, amigos adoradores, como veis, meditar este tema y esta realidad. Os animo a tenerlos (a los Ángeles) más en cuenta en este mes y en los sucesivos. Siempre. Como dice el título general de esta serie que comenzábamos el mes pasado.

“El coro de todos los ángeles siempre Te bendice en el alto Cielo, y juntamente con Todos los Santos te corona con alabanzas”.

Es una estrofa de un himno (traducido del latín) del Oficio de Lectura del día 1 de noviembre.

Yo mismo Os encomiendo a vuestros ángeles custodios -de alguna manera todos los días- pues “todos nosotros, según la tradición de la Iglesia, tenemos un ángel con nosotros, que nos protege, nos hace oír las cosas…” (Papa Francisco 2-10-2014).

Burgos, día uno de noviembre de 2019, Solemnidad de todos los Santos.

 

Fdo.: José Luis Esteban Vallejo, Pbro.
CONSILIARIO NACIONAL DE ARPU

 

[1] Cf. José Luis Esteban Vallejo, La Eucaristía al ritmo del tiempo y de la vida del cristiano, Monte Carmelo, Burgos 2003,  324 pp.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies